El uso de alcohol, tabaco y drogas recreativas durante el embazo, puede acarrear complicaciones, principalmente al bebé.
Tabaco: puede causar parto prematuro y restricción del crecimiento intrauterino, los bebés de madres fumadoras tienen más riesgo de asma, cólicos y obesidad en la niñez.
Alcohol: puede causar discapacidades físicas, mentales, de comportamiento y aprendizaje. Puede ocasionar el síndrome de alcoholismo fetal (problemas de desarrollo, conductuales, mentales y facciones anormales). No hay nivel seguro de alcohol en el embarazo, por lo que se recomienda no ingerir bebidas alcohólicas.
Cocaína: se relaciona con malformaciones cardíacas y de sistema nervioso central.